Publicista y práctica. Editora de Pulpture, Costas de Carcosa, y de Ánima Barda presenta. También publico con el seudónimo de Alicia Calaza. Tengo varios blogs, frío en invierno y mal genio. Escribo relatos de todo tipo, aunque me siento más cómoda con la ciencia ficción y el erotismo. Una mezcla explosiva. Así se define Cris Miguel en su perfil de Goodreads. Y razón no le falta, cuenta en su haber con una prolífica bibliografía, novela, mucho relato, microrrelato, artículos de opinión... pero lo mejor será que os deje con ella.
1. ¿Qué es
lo más drástico que has hecho por el arte?
Intentar
vivir de él las veinticuatro horas del día —no, mentira, duermo profundamente,
soy una marmota—. Pero sí, vivir de él. Te enfrentas a muchas miradas
escépticas, algo que me revienta sobremanera —todo hay que decirlo—, cuando le
cuentas a familia/conocidos/amigos ingenieros que vas a profesionalizar tu
pasión y dedicarte a ello en exclusiva; qué máster ni qué prácticas en empresa,
¿a mí, de qué? Tampoco es que haya tenido esta conversación, seria, con nadie.
La editorial surgió con el crowdfunding, pero, como hacíamos la revista desde
hace dos años, no fue un cambio drástico de «dejo todo, me hago ermitaño». Así
que los del exterior te preguntan, algunos con más educación que otros, unos
con más condescendencia, que si eso tira, que si ganáis dinero, que si los
libros que sacamos son para un público pequeño, que qué hacemos… Así que lo más
drástico que he hecho por el arte es no dar rienda suelta a mi ira y no matar a
nadie :D.
2. El mejor
consejo que has recibido de un artista.
Nadie
se atreve a darme consejos, ¿te lo puedes creer? :D Mira que estoy rodeada de
artistas… No lo sé, he recibido consejos puntuales sobre algo específico,
opiniones que he pedido y me han resultado verdaderamente útiles. Pero si nos
referimos más a una frase motivacional… no. Soy la dura, y soy yo la que saca
la vena terapeuta e intento reforzar autoestimas y debilidades ocasionales. Así
que voy a hacer lo que me da la gana con esta pregunta y te voy a decir lo que
más aconsejo a «mis niño/as» —yo, que soy una artista—: escribe/pinta/compone/crea
para ti, olvídate del resto.
3. Si
tuvieras que vivir en el interior de un cuadro, ¿cuál sería?
Si
me preguntas por mi pintor favorito diría Manet, pero vivir en un cuadro, en
una escena… ya es otra cosa. Así que si tuviera que vivir en un cuadro, y para
evitar aburrirme, soy poco constante me canso rápido de las cosas, me quedo con
el colorido y abstracto Kandinski y su composición VII.
4. Los
escritores se nutren de obsesiones. ¿Cuáles se reflejan en tus obras?
¡Con
lo obsesiva que soy! Una de las cosas que más me molestan de una historia son
los personajes simples y mal construidos, así que estoy obsesionadísima con que
los míos suenen naturales y actúen coherentemente, no que se limiten a servir a
la trama. Quiero que sean reales, da igual que hablemos de ciencia ficción,
terror o weird, son humanos con sus defectos, virtudes y traumas. Evidentemente
depende de la extensión, se pueden desarrollar más o menos, pero los matices
siempre están ahí, aunque sean sutiles, para quien quiera verlos.
5. En una entrada
de este blog hablé al público acerca de mi campo semántico personal y
me gustaría que compartieras el tuyo. Puedes acompañarlo de una
reflexión acerca de tu estilo.
No
creo que tenga un campo semántico destacable. Toco varios géneros, así que cada
historia tiene sus campos semánticos particulares. No hay ninguno que comparta
un núcleo determinado que incluya en varios escritos, o al menos no soy
consciente. Cada historia tiene su ambientación y, más que palabras recurrentes
por su estética, en «mi estilo» se podrán encontrar estructuras determinadas.
Aunque estas, como las propias palabras, cambian según las influencias
(televisivas, literarias o circunstanciales) que haya tenido recientemente,
antes o durante el proceso de escritura.
Mi
estilo es lacónico y tajante. No divago, ni me pierdo entre las ramas frondosas
de ningún árbol. De hecho las descripciones es algo que soy consciente que
tengo que reforzar, aunque me resulten un rollo.
6. ¿Qué ha sido lo más complicado de escribir A muerte? Cuéntanos algo que no te hayan preguntado acerca de esta novela.
Lo
más complicado de escribir A Muerte es escribir la segunda parte, continuarla.
Porque escribir A Muerte fue una tarde, salió sin más. No tengo nada anotado de
ese mundo, de los personajes —de los cuales me olvido de sus nombres y tengo
que abrir el original… Qué desastre—. Ahora entendéis que lo complicado es
continuarla, ¿verdad? ^^
A
Muerte es un relato que se me fue de las manos —que, con la cantidad de relatos
que escribo, solo me ha pasado con estas señoritas— por eso no puedo dar
lecciones ni consejos, fue un rato de inspiración. Eso sí, me acuerdo que
estaba muy influenciada por Juego de Tronos, que me estaba leyendo algún libro
de la saga en ese momento. Y se nota. Yo lo noto.
7. Tú has participado en diversas
antologías con relatos (Conjura, ¿Qué ha sido eso? Compendio del terror, Elcorazón hace pulp pulp, Deseo eres tú…), ¿qué opinión te merece la ficción
breve?
Sí,
tengo relatos en antologías y en folletines. Me encanta la ficción breve. Hay
un tipo de literatura para cada momento, el relato de ficción en este caso es
para pasártelo bien, para ir en transporte público y quedarte satisfecho, para
coger ideas, y para conocer nuevos autores. Qué placer da quedarte con un
nombre, porque te ha gustado el relato de Fulanito en Tal antología, y luego
buscarlo y seguir leyendo cosas suyas.
Como
escritora permite probar géneros diferentes, probar etilos narrativos,
experimentar y eso siempre está bien. Te hace ser concisa, es una forma
distinta de narrar y a veces más complicada, porque tienes menos espacio para
crear una historia que no parezca sacada de una plantilla y olvidarte de
clichés.
Y
como editora es más fácil de corregir y más rápido de publicar. En un relato
puedes ver las malas costumbres de algunos escritores, tanto en lo estilístico
como en lo ortográfico. Y devolverlo corregido, comentado, hace mejorar,
quitarte esos malos hábitos. Y amigos, una cosa es corregir un relatillo de
5000 palabras y otra muy distinta una novela de 50000. Por eso es tan
importante el relato, porque se captan antes errores que el escritor ya aprende
y corrige, listo para reescribir o pulir el manuscrito que tiene guardado en el
cajón, o escribir una gran historia desde cero.
8.
¿Contradicciones en tu proceso creativo? ¿Cómo es tu método de trabajo?
¿Y cómo afecta tu formación de editora a tu faceta de escritora?
Contradicciones…
Fíjate, en otras facetas de mi vida sí soy contradictoria y cambiante, pero
escribiendo no. Si tengo que escribir un relato, dedico varios días a darle
forma mentalmente, pincelar la historia, qué contar y cómo contarlo, y luego me
pongo a escribir. Supongo que puede considerarse contradicción motivarme mucho
con una idea y luego dejarla a medias, olvidada en la carpeta de docs sin terminar;
pero es que soy de mecha corta.
Iba
a decir que mi método es no tener método, pero suena tan manido que me odio por
pensarlo :D No, mi método es caótico. No soy nada organizada. Tengo picos de
efervescencia creativa y otros de apatía máxima. Te puedo decir que me suelo
hacer un esquema antes de lo que va a ocurrir, marcar la estructura, aunque
luego cambie los acontecimientos sobre la marcha.
Mi
formación de editora me afecta a la hora de autoexigirme. Evidentemente, si
«doy lecciones» u opino sobre lo que escriben «mis niños», lo mío tendría que
dar ejemplo, partir de una base alta. Pero bueno, tampoco creo que me afecte a
la hora de escribir, sería exigente si no editara nada.
9. ¿Cómo es tu lugar de trabajo? ¿Crees que influyen el lugar de nacimiento y el entorno a la hora de ser escritor?
Mi
lugar de trabajo, pues es… ordenado, amplio. Aunque si logro concentrarme me da
igual cómo es mi mesa. Eso sí, necesito música para crear la burbuja. Me
resulta complicado escribir en silencio (entendiendo por silencio el ruido
ambiente de ciudad de fondo).
Claro
que sí, todo te acaba condicionando. Las experiencias que has tenido por vivir
en un entorno o en un sitio determinado ha hecho que escribas sobre aquello o
lo de más allá. Aunque bueno, también creo en la autenticidad y hay cosas,
actitudes, de las que no nos damos cuenta, que las desarrollaríamos en cualquier
parte.
10. ¿Cómo fueron tus inicios como escritora? ¿Cuándo te diste cuenta de que te gustaba esto de juntar letras?
«Siempre
me ha gustado», respuesta estándar, pero cierta. Desde que aprendí a escribir
con bolígrafo escribo un diario, ¡tengo entradas con ocho años! Así que siempre
he estado predispuesta a poner las cosas por escrito. Luego fui creciendo, y de
lo primero que tengo constancia que escribí fue una historia de terror tipo
Scream, porque me encantó la peli, era una preadolescente con mucho mundo
interior :D
Me
lo planteé más profesionalmente cuando estuve a punto de elegir periodismo en
vez de publicidad. Pero hasta que no creamos Ánima Barda no me puse a escribir
en serio. No me veía preparada, y escribir cosas para guardarlas en el cajón es
frustrante, y la frustración me da ira. En fin, pero supongo que me di cuenta
cuando empecé a ser exigente con los libros y a plantearme altivamente que yo
podía, puedo, hacerlo mejor.
11. Escritura terapéutica. ¿Cómo lo ves?
¿Qué supone para ti el acto de escribir?
Uff,
estoy muy en contra de hacerse los trascendentales con frases tipo: «escribir
me hace mejor persona». Mira no, yo escribo porque me divierte, porque a veces
me supone un reto, pero cero pretensiones (además como método terapéutico
utilizo el diario sin dar la brasa a nadie con mis movidas :P). Hacerlo como
algo terapéutico a veces se nota. La escritura no es para desahogarte o al
menos el lector no se tiene que dar cuenta de que lo estás haciendo. Me he
encontrado un montón de textos donde al protagonista le han echado de su
trabajo y aprovecha para cargar contra el sistema, que en la mente del escritor
es crítica social, pero en la del lector es sermón. Hay que tener cuidado con
no dar la charla política, social o ecológica.
Además
aprovecho para decir que no todo el mundo está hecho para «el acto de
escribir», o al menos para ser publicado y leído masivamente, escribir es una
profesión, necesita técnica, trabajo, esfuerzo, una base académica, no por
tener un ordenador y un procesador de textos todo el mundo «puede» hacerlo. Que
tenemos una falsedad moral encima que no beneficia a nadie, y justamente que
todos lo intenten o publiquen en sus blogs devalúa la escritura en general,
pero bueno este es un tema farragoso del que hablar largo y tendido.
Da gusto leer una entrevista tan fresca. La personalidad de la autora ha traspasado la pantalla a través de sus letras y si ha conseguido respondiendo preguntas, no dudo que sus personajes serán tan verosímiles y naturales como ella deseé crearlos.
ResponderEliminarSaludos ^^
Su novela A muerte estuvo en descarga gratuita durante bastante tiempo, hasta que los lectores pidieron una edición en papel. Así que sí, sus personajes cumplen lo que promete.
EliminarUn abrazo, Carmen :)
Me ha encantado la entrevista, como dice Carmen, tiene unas respuestas muy frescas, se respira la originalidad de la autora, su chispa!!
ResponderEliminarEnhorabuena a ambas por ella!!
Un abrazo!
Es un placer saber que disfrutáis de este tipo de entrevistas. Eso es, Cris tiene chispa y es un amor como persona.
Eliminar¡Otro abrazo bien grande para ti, sweetheart!
Ole sus ovarios! y frustraciones las justas ;) nada de escribir y guardar en el cajón, a sacar los sueños p'alante y a juntarse con buena gente.
ResponderEliminarGracias por la inspiración :D
un abrazo!!!
Guardar en el cajón no es recomendable, es mejor compartir y mejorar gracias a las opiniones y observaciones de los demás.
EliminarMe alegro de que te haya gustado :)
Perdón por el retraso en mi respuesta. ¡Abrazos, amiga!