A un beso del pasado

Jamás un beso le había hecho sentir así. Era como bailar al son de una música inexistente, como encontrarse en el interior de un tornado dando vueltas mientras todo a su alrededor era oscuridad y silencio.

Título: A un beso del pasado.

Autora: Ana F. Malory

Editorial: B de Books.

Precio: 1,89 €.

Páginas: 249.

Sinopsis: Una chica de hoy en día con ropas de otra época...
Elaine está entusiasmada porque su mejor amiga va a celebrar su fiesta de compromiso y los invitados deberán asistir ataviados de época. Será una noche maravillosa: trajes elegantes, vestidos deslumbrantes y la compañía de Harry. Un plan estupendo…
Lo que prometía ser una velada perfecta termina convirtiéndose en una pesadilla. Harry le ha dado plantón y en su lugar, para que la acompañe, ha enviado a John... al que Elaine detesta profundamente.
Es arriesgado pedir un deseo porque se puede hacer realidad...
Descubrir el motivo por el que Harry no ha ido a recogerla ni se ha presentado a la cena, termina estropeándole la fiesta y haciéndole ansiar estar en cualquier otro lugar y encontrar a un hombre al que realmente merezca la pena amar.
Una alineación planetaria, los anhelos de una joven decepcionada, un oportuno y maravilloso beso y un viaje para dos a través del tiempo será el inicio de una apasionante aventura.

Elaine está emocionada, después de semanas de trabajo el gran acontecimiento está a la vuelta de la esquina: la fiesta de compromiso de su mejor amiga, Charlotte. Pero la unión de Charlotte y Peter no será común, ya que todos los invitados deben ir vestidos de época. Desde que eran niñas Elaine y Charlotte se han sentido fascinadas por las cortesanas del pasado, sus bailes, la sociedad del momento, los vestidos...

Y para rematar la noche, Harry irá a recogerla... en teoría. Harry es el típico Casanova, un inconsciente al que le importa más el placer inmediato que sus amigos, o la propia Elaine.

Y luego está él, John, antítesis de Elaine. El uno goza de la enemistad del otro desde su primer encuentro, por desgracia es el mejor amigo de Harry y Peter, por lo que es bastante común que ambos tengan que soportar la presencia del otro.

—Gracias, querida. Tengo que confesar que cuando Charlotte me dijo lo que quería hacer pensé que se había vuelto loca —contó riendo— pero ahora estoy encantada. Es como viajar en el tiempo… —al menos alguien había captado la idea, pensó Elaine sin dejar de sonreír.

Por desgracia la tan esperada noche de ensueño no sale como Elaine tenía previsto. El caprichoso Harry la deja en la estacada y para colmo envía en su lugar a John. El nuevo acompañante de Elaine descubre, estupefacto, que ella no es tan desagradable como él pensaba. Y cuando él descubre que Harry se estaba acostando aquella misma noche con una secretaria de Glasgow, trata de proteger a Elaine de la verdad.

La muchacha está al borde del llanto y John hace algo impensable que lo cambiará todo:

La sensación de impotencia se fundió con el deseo de consolarla aun sin saber cómo hacerlo. Pero ante todo, sentía la urgente necesidad de evitar que comenzara a llorar. Cuando el primer sollozo salió de su boca actuó dejándose llevar por un impulso. Sin detenerse a pensar en lo que estaba a punto de hacer la atrajo hacia él y pegó sus labios a los de ella. Sabía que aquel beso le costaría caro y tendría suerte si no terminaba con la cara del revés, pero se arriesgaría.

Ups, olvidé comentaros un detalle importante... (o quizá me lo callé a propósito, quién sabe je,je,je) esa misma noche se da una conjunción planetaria cuyas consecuencias son nada menos que un viaje en el tiempo, al pasado. La magia del beso, la conjunción y los deseos de Elaine lo harán posible. Pero no estará sola, John se ve arrastrado a esta trepidante aventura.

¿Aspectos positivos de la novela? Los personajes son muy realistas, no son perfectos como tú y como yo, algo que muchas novelas actuales olvidan por completo. No nos interesan hombres y mujeres de hielo, sin una sola grieta, queremos luces y sombras, pues lo uno es impensable sin lo otro. Son las dos caras de la misma moneda.
Buen trabajo de documentación, especialmente en cuanto a vestimenta se refiere, podemos ver perfectamente con los ojos de nuestra imaginación sus atuendos, barrocos, pero llenos de encanto.
Y humor, mucho humor. Tanto en los duelos que estos dos mantienen, como en los pensamientos de Elaine:

—No puede ser, es imposible —farfulló y sin hacerle el menor caso se dirigió con largas zancadas hasta el siguiente poste de luz y después al siguiente. Elaine no daba crédito. Estaba perdida en Londres con un demente.
—¿Se puede saber qué haces? — preguntó elevando la voz para hacerse oír. John no respondió pero regresó a su lado tan rápido como se había ido, solo que con una expresión tensa en el rostro y ligeramente más pálido. Seguramente por el frío que estaba pasando el pobre hombre, pensó arrebujándose egoístamente con su chaqueta. Se sintió como Gollum. Confirmado. La locura era contagiosa.

Otro punto fuerte de la novela son unos secundarios interesantes, como la anciana Amelia que aportará mucho a la pareja.

Lo que menos me ha gustado ha sido la inseguridad de Elaine y algunas de sus borderías con John, a veces llegaba a ser demasiado repetitiva la cosa. Es lo único que le veo en ese sentido...

El estilo de la novela es ameno, sin abusar de las descripciones, muy equilibrado. Engancha desde la primera página es una de esas novelas que se devoran en pocos días.

¡Y para qué nos vamos a engañar! 

¡Adoro los viajes en el tiempo!

Una lectura entretenida, que me deja con ganas de leer más obras de esta autora.