Al principio nos sorprendió en el trato la parquedad de sus
palabras, sobre todo entre los muy pobres. Más tarde averiguamos que ello era
debido a una insólita costumbre según la cual el Emperador es el único dueño y
señor de la lengua viroche, no pudiendo sus súbditos disponer libremente de las
palabras sin antes pagar por cada una de ellas un precio convenido.
Título: Los que duermen.
Autor: Juan Gómez Bárcena.
Editorial: Salto de página.
Páginas: 123.
Precio: 14€.
Sinopsis:Una recóndita ciénaga de Germania, donde los cuerpos de cientos de prisioneros sacrificados a los dioses emergen a la superficie siglos más tarde, devolviendo al presente el enigma de su existencia. Un reino remoto donde los mercaderes comercian con palabras. Un Aquiles cobarde que abandona Troya para disfrutar la vida que los dioses no quieren dejarle vivir. Un simulacro de campo de concentración construido por Hitler para burlar las inspecciones de la Cruz Roja Internacional. Una comunidad de robots abandonada que sigue anhelando el regreso de sus creadores.
Juan Gómez Bárcena nos sorprende con una extraordinaria colección de
relatos que, en la mejor tradición del fantástico, nos invita al
extrañamiento para devolvernos una mirada más lúcida sobre nosotros
mismos. Estos quince relatos proponen un viaje por las orillas del
tiempo; un recorrido por pasados y futuros asombrosos del que
volveremos, como de todo viaje, siendo otros.
Otro aspecto interesante con el que juega el autor son las distintas versiones de una misma historia, aunque en algunos casos más adelante se nos dan pistas de lo que pudo suceder en realidad.
Según el relato también se hace uso de un registro y otro, como sucede en Cuaderno de bitácora I y II, que contrasta con el resto.
Se dan temas recurrentes como puede ser el viaje, el tiempo, la inmortalidad, la fe, lo relativo, la imaginación y la curiosidad humana. La ambigüedad reina en muchos de ellos. El teatro dentro del teatro en un campo de concentración...
Para finalizar me gustaría ofreceros unas pinceladas de mis relatos favoritos:
En Cuaderno de bitácora, conoceremos al pueblo de los viroches que comercian con palabras, pues el idioma pertenece al Emperador. Pese a todo se consideran muy liberales y democráticos, cualquier puede opinar, el problema es que la gente sin solvencia económica es incapaz de hilvanar un discurso largo y mucho menos defender una tesis.
Fábula del tiempo, seremos partícipes del sufrimiento de la reina Bandica, cuyo esposo acaba de fallecer debido a la diferencia de edad, ya que al contraer matrimonio él era un anciano y ella poco más que una chiquilla. Sin embargo, cuando Bandica escucha a uno de sus sabios hablar sobre las estrellas y su luz —que llega hasta nosotros mucho tiempo después de su muerte— diseñará un plan para volver junto a su amado.
Juan Gómez Bárcena |
Son muchos los que defienden la inexistencia de la casualidad, este axioma se reafirma una y otra vez a lo largo de las páginas de esta obra de Juan Gómez Bárcena.
Los que duermen me ha sorprendido gratamente, debo decir que he devorado esta joyita en apenas tres días (los exámenes han tenido la culpa).
¿En qué época o escenario transcurre la acción? ¿Quiénes son los protagonistas? Las posibilidades se adivinan infinitas en este universo pincelado por el autor que con un ritmo trepidante nos lleva a edades míticas, se detiene en el mundo actual e incluso traspasa la frontera de nuestro futuro, y esto creedme, tendrá consecuencias.
Cuentan las leyendas cairas —aunque miente todo aquel que cuenta una historia— que Itata y Axime son padre y madre de todos los hombres, desde el más mísero hasta el más próspero. Pasados los siglos, la mayoría de los pueblos lo han olvidado y se refieren a ellos con nombres falsos y sacrílegos.
Ishtar
¿Y el género? Al igual que hay saltos en el tiempo nos encontramos algo similar en este aspecto, Ficción Histórica, Fantasía, Mitología, Religión y Ciencia Ficción se dan la mano a través de este emocionante viaje.
Encontraremos algunos rostros conocidos como los de Hitler o Aquiles.
Pero no os equivoquéis no se trata de un simple compendio, no, existe un hilo conductor: las momias. Sí, cada una de ellas con una historia diferente que se han conservado en una ciénaga cuyos componentes se presumen especiales. Las diversas culturas y tiempos le darán toda suerte de pintorescas explicaciones a este fenómeno, algunas serán veneradas; otras conservadas en museos... Al final el lector comprende que son eternos viajeros, de cuya odisea no se vislumbra todavía el final.
A continuación os enumero mis cuentos favoritos, eso sí, todos me han gustado y han producido un impacto en mí: Cuaderno de bitácora, Fábula del tiempo, El regreso, La leyenda del rey Aktasar, Zigurat, Los que duermen, 2374, La espera.
Otro aspecto interesante con el que juega el autor son las distintas versiones de una misma historia, aunque en algunos casos más adelante se nos dan pistas de lo que pudo suceder en realidad.
Las dunas recorridas por hombres que cabalgaban extraños camellos con ruedas, y el cuelo surcado por inmensos insectos metálicos.
Vio a un rey recorriendo a lomos de una yegua vieja y desdentada las fronteras de su reino, que abarca el orbe entero.
Según el relato también se hace uso de un registro y otro, como sucede en Cuaderno de bitácora I y II, que contrasta con el resto.
Se dan temas recurrentes como puede ser el viaje, el tiempo, la inmortalidad, la fe, lo relativo, la imaginación y la curiosidad humana. La ambigüedad reina en muchos de ellos. El teatro dentro del teatro en un campo de concentración...
Para finalizar me gustaría ofreceros unas pinceladas de mis relatos favoritos:
En Cuaderno de bitácora, conoceremos al pueblo de los viroches que comercian con palabras, pues el idioma pertenece al Emperador. Pese a todo se consideran muy liberales y democráticos, cualquier puede opinar, el problema es que la gente sin solvencia económica es incapaz de hilvanar un discurso largo y mucho menos defender una tesis.
Y más tarde una nación de hombres que no eran hombres, pues estaban hechos de metal y tenían tenazas en lugar de manos y cajas en vez de cuerpos. Vio miles de máquinas esperando, siempre esperando; eternamente esperando con los focos oculares clavados en el cielo.
Zigurat |
La leyenda del rey Aktasar Itata y Axime son los padres de la humanidad, que ignorando a sus hijos, permanecen enzarzados en un pulso que se prevé eterno. Tan solo su pueblo predilecto, los caldeos, los recuerdan. El único presente que le han dejado a la humanidad ha sido una prodigiosa yegua capaz de cabalgar con su jinete a través de las eras, pero el tiempo y el espacio han sido escrupulosamente delimitados por los dioses, el jinete tiene prohibido superar estas marcas.
Zigurat, en el interior de esta construcción se esconden los secretos de un pasado, presente y futuro ya vislumbrados.
Os animo a adentraros en esta hermosa obra y a descubrir los hilos invisibles que lo conectan todo. Porque una vez que los engranajes literarios de Los que duermen empiezan a funcionar... no hay vuelta atrás.
Me he quedado alucinada! Tiene una pinta genial, un derroche de creatividad en su máximo exponente, con la mezcla de tantos géneros distintos y de tantas historias, con las momias en común.
ResponderEliminarLa experiencia del viaje ha tenido que ser espectacular y extraña!
Un abrazooo
Hola amiga :)
EliminarSí, espectacular es la palabra. Ya me imaginaba que te gustaría, o que como mínimo llamaría tu atención. Y aún así he suprimido muchas cosas para no hacerla interminable y para no desvelar demasiado acerca de los relatos, es mejor dejar que el lector se empape de esa magia :)
¡Un abrazo!
Buenas. Si te gustó Los que duermen, te recomiendo El cielo de lima, porque recoge bastantes ideas teóricas que salen en los relatos de esta antología y las lleva a otro nivel. Y también creo que te gustaría Farmer Stop, aunque esa será más difícil de conseguir.
ResponderEliminarEste autor va a dar mucho que hablar en el futuro seguro. Tuve la suerte de que vino un día a mi clase a dar una charla (estudió Historia aparte de Literatura) sobre el cuento de La Leyenda del rey Aktasar. Si le oyes hablar, te quedas alucinado de lo que sabe y de su visión de la literatura.
En serio, te recomiendo que busques las otras cosas que tiene.
El cielo de lima será mi siguiente lectura :)
ResponderEliminarY sí, yo también creo que dará mucho de qué hablar.
En mi caso tuve la suerte de conocerle durante la presentación que hizo en la universidad de Zamora, nos leyó algunos fragmentos de la novela (el capítulo centrado en la rata) y me pareció maravilloso.
Buscaré el resto de su obra.
¡Un abrazo!