Creando mundos (VII)

“Creo que lo más importante para cualquier aspirante a escritor es… ¡Leer! Y no sólo sobre el tipo de obra que estas tratando de escribir, ya sea fantasía, ciencia ficción, cómics… Lo que sea. Necesitas leer de todo. Lee ficción, no ficción, revistas, periódicos. Lee sobre Historia, ficción histórica, biografías. Lee novelas de misterio, fantasía, ciencia ficción, horror, libros que atraen a la mayoría del público (mainstream), los principales clásicos, erótico, aventura, sátira. Cada escritor tiene algo que enseñarte, para bien o para mal. (Y sí, como de los buenos libros, puedes aprender de los malos, en este caso: lo que no se debe hacer).

Y escribe. Escribe todos los días, incluso si es sólo es una página o dos. Cuanto más escribes, mejor lo harás. Pero no escribas sobre mi universo, el de Tolkien, el universo Marvel o el universo de Star Trek o cualquier otro trasfondo prestado. Todo escritor necesita aprender a crear sus propios personajes, mundos y escenarios. Usar el mundo de otro es el camino del vago. Si no ejerces estos músculos "literarios", nunca se desarrollarán.

Dada la realidad del mercado actual de la ciencia ficción y la fantasía, yo también quiero sugerir que cualquier aspirante a escritor comience con cuentos. En estos días, me encuentro con demasiados jóvenes escritores que tratan de empezar con una novela de inmediato o una trilogía o incluso una serie de nueve libros. Eso es como empezar a escalar haciendo frente al Everest. Los cuentos ayudan a aprender su arte. Son una buena forma para que cometas los errores que cada escritor principiante va a cometer. E incluso son la mejor manera para un escritor joven de comenzar, ya que las revistas siempre están hambrientas de historias cortas de ciencia ficción y fantasía. Una vez que hayas vendido cuentos durante cinco años, más o menos, te habrás construido un nombre por ti mismo y los editores comenzarán a preguntarte por tu primera novela.

Hagas lo que hagas... Buena suerte. La vas a necesitar”.